As-salamu alaikum. ¿Está permitido pedirle a Al-lah que borre los recuerdos de un suceso traumático? Hace un tiempo pasé por un suceso extremadamente traumático. Ha sido muy desgastante para mí porque me sumió en una severa depresión y me persiguen los recuerdos cada segundo del día. No puedo dormir, e incluso si duermo sigo viendo sueños sobre ese suceso. Se repite constantemente en mi cabeza y me causa problemas de concentración y enfoque. He probado con el tratamiento y los medicamentos, pero no han funcionado. Los flashbacks me vuelven loca y he estado a punto de suicidarme varias veces, pero el miedo al castigo de Al-lah y a tener un dolor y un sufrimiento eternos después del suicidio es lo que me mantiene alejada de hacerlo. Suplico constantemente para que Al-lah me ayude a superar todo esto, pero me he dado cuenta de que la única forma de superarlo es que estos recuerdos se borren de mi cabeza. Sé que Al-lah es capaz de todo y que su poder trasciende nuestro entendimiento, pero, ¿es permisible mi pedido? Realmente no conozco otra forma de seguir adelante. Necesito olvidar esto.
Las alabanzas sean para Al-lah, Señor y Creador del universo, y que Su paz y Sus bendiciones sean con el Profeta Muhammad, con todos sus familiares y todos sus discípulos.
Si recordar ese incidente te causa dolor, ansiedad y tristeza, entonces es malo. Es lícito que una persona busque refugio en Al-lah del mal y le pida que se lo quite.
Por lo tanto, debes esforzarte en suplicar a Al-lah que te haga olvidar ese incidente en particular. No vemos nada malo en suplicar a Al-lah para que borre tus recuerdos dolorosos que te causan ansiedad y tristeza.
Querida hermana, te recomendamos que supliques a Al-lah tanto como te sea posible empleando las súplicas para eliminar la preocupación y la ansiedad, como el hadiz narrado por Anas Ibn Malik, que Al-lah esté complacido con él, que dijo: “Mientras servía al Profeta, la paz y las bendiciones de Al-lah sean con él, solía oírlo decir muchas veces:
اللَّهُمَّ إِنِّي أَعُوذُ بِكَ مِنَ الهَمِّ وَالحَزَنِ، وَالعَجْزِ وَالكَسَلِ، وَالبُخْلِ وَالجُبْنِ وَضَلَعِ الدَّيْنِ، وَغَلَبَةِ الرِّجَالِ
“¡Oh Al-lah! me refugio en Ti de las preocupaciones y las tristezas, de la debilidad y la vagancia, de la avaricia y la cobardía, del peso de las deudas y de ser dominado por los hombres” (Al Bujari).
Además, Ali Ibn Abi Talib, que Al-lah esté complacido con él, narró que el Profeta, la paz y las bendiciones de Al-lah sean con él, le enseñó las siguientes palabras y le ordenó que las dijera cuando le ocurriera cualquier dificultad o calamidad:
لَا إِلَهَ إِلَّا اللَّهُ الْكَرِيمُ الْحَلِيمُ، سُبْحَانَهُ وَتَبَارَكَ اللَّهُ رَبُّ الْعَرْشِ الْعَظِيمِ، وَالْحَمْدُ لِلَّهِ رَبِّ الْعَالَمِينَ
“Nada ni nadie tiene derecho a ser adorado excepto Al-lah, el Generoso, el Tolerante. Glorificado Seas (estás exento de imperfección) y Bendito sea Al-lah, Señor del Magnífico Trono. Y alabado sea Al-lah, el Señor de toda Su creación” (Ahmad, An-Nasa’i, Al Hakim e Ibn Hibban).
También, el Profeta, la paz y las bendiciones de Al-lah sean con él, dijo en otro hadiz: “Conozco unas palabras que si la persona que se encuentre en dificultades las dice, Al-lah le facilita una salida; es la súplica de mi hermano Yunus [Jonás] [cuando suplicó a Al-lah mientras estaba en el vientre de la ballena]:
لا إله إلا أنت سبحانك إني كنت من الظالمين
‘Nada ni nadie tiene derecho a ser adorado excepto Tú, Glorificado Seas (estás exento de imperfección), ciertamente he sido de los injustos’” (At-Tirmidhi).
Además, Nafi’ Ibn Al Hariz, que Al-lah esté complacido con él, narró que el Profeta, la paz y las bendiciones de Al-lah sean con él, dijo: “La súplica de una persona que está atravesando dificultades es:
اللهم رحمتك أرجو، فلا تكلني إلى نفسي طرفة عين، وأصلح لي شأني كله، لا إله إلا أنت
‘Oh, Al-lah, anhelo Tu misericordia, no me abandones ni siquiera lo que dura un parpadeo, y facilita todos mis asuntos, nada ni nadie tiene derecho a ser adorado excepto Tú” (Ahmad y Abu Dawud).
Asimismo, Ibn ‘Abbas, que Al-lah esté complacido con ambos, narró que el Profeta, la paz y las bendiciones de Al-lah sean con él, solía pedirle a Al-lah en momentos de dificultad y calamidad con la siguiente súplica:
لا إله إلا الله العظيم الحليم، لا إله إلا الله رب السموات والأرض ورب العرش العظيم
“Nada ni nadie tiene derecho a ser adorado excepto Al-lah, el Grandioso, el Tolerante. Nada ni nadie tiene derecho a ser adorado excepto Al-lah, Rabb (Señor) de los cielos y la Tierra, y Rabb (Señor) del Trono grandioso” (Al Bujari y Muslim).
Por lo tanto, querida hermana, pídele a Al-lah empleando las súplicas anteriores tanto como te sea posible y también recita el Corán tanto como puedas, realiza las oraciones obligatorias en su momento prescrito, y si Al-lah quiere, tus problemas se resolverán, y te sentirás tranquila y a gusto.
Debes pensar bien de Al-lah y tener cuidado con los susurros del diablo que te incitan a que te suicides, ya que la persona que se suicida tendrá como destino el fuego del Infierno; nos refugiamos en Al-lah de eso.
Abu Hurairah, que Al-lah esté complacido con él, narró que el Profeta, la paz y las bendiciones de Al-lah sean con él, dijo: “Quien se arroje deliberadamente desde una montaña y se suicide, estará en el fuego del Infierno arrojándose eternamente. Quien beba veneno y se suicide, llevará veneno en su mano, y lo beberá en el fuego del Infierno eternamente. Quien se suicide con una pieza de hierro, llevará esa pieza de hierro en su mano y se apuñalará a sí mismo en su estómago con ella en el fuego del Infierno eternamente” (Al Bujari y Muslim).
Para ampliar más el tema, por favor consulta las fatawa 88282 y 86204.
Y Al-lah sabe más.